Queremos hablarte de las ineficiencias habituales en el consumo eléctrico, con el propósito de que puedas detectar dónde se dispara la factura y en qué puntos puedes reducir el consumo. 

En la actualidad y, dada la situación global que estamos viviendo, ha habido un aumento en la preocupación por el gasto energético. Por ello, os traemos cuatro ineficiencias energéticas para que tengas en cuenta la importancia de estas y poder decidir, desde el conocimiento, si optimizar y cómo hacerlo para reducir tu factura. 

¿Qué consume un gasto innecesario en la factura de la luz?

• Elementos enchufados sin ser utilizados 

Hay aparatos que suelen estar permanentemente enchufados a la corriente, y a pesar de no estar en funcionamiento siguen consumiendo energía. Hablamos de ordenadores, de televisores, cargadores del móvil, cafeteras y un largo etc. 

Para solucionar esto es recomendable usar regletas con interruptor y apagarlas cada vez que dejemos de usar los dispositivos conectados. Otra solución son las regletas con eliminador de “Stand by”, estas cuando detectan que el consumo es muy bajo cortan el suministro.  

• Contratación errónea de la potencia eléctrica 

Elegir la tarifa de la luz adecuada a los ritmos y hábitos de consumo eléctrico será la clave para reducir las ineficiencias habituales en el consumo eléctrico. 

El primer paso es entender tu consumo y los puntos clave para decidir qué contratar.
Y el segundo paso, es entender todas las posibilidades de contratación que tenemos. 

Actualmente hay cuatro grandes tarifas generales: tarifa de la luz fija, tarifa de la luz variable, tarifa plana de la luz y tarifa regulada.

• No sustituir las bombillas tradicionales 

Las lámparas halógenas utilizan hasta 10 veces más cantidad de electricidad que las bombillas led o de bajo consumo. 

Aunque la inversión en bombillas de bajo consumo es más elevada, el ahorro eléctrico y la durabilidad de las bombillas supone un ahorro económico a medio plazo en la factura de la luz.

Esto es un sencillo cambio que valdrá la pena. 

• No tener en cuenta la importancia de un buen aislamiento 

Si pretendemos tener el control del gasto de la luz de cualquier lugar, es de vital importancia entender un mal aislamiento como una ineficiencia energética en el consumo eléctrico. 

Para solucionarlo debemos identificar y controlar las fugas de aire. Mayoritariamente estas las encontramos en puertas, ventanas, conductos de ventilación y extractores. 

Algunas de estas fugas deberás ponerlas en manos de un profesional, pero otras muchas podrás resolverlas tú mismo con bandas de silicona u otros materiales que sellen herméticamente. 

Aplicando en medida de tus posibilidades cualquiera de estas pautas, verás cómo tu factura de la luz se reduce y convertirás, allí donde apliques las ineficiencias habituales en el consumo energético, en un lugar más eficiente. 

Si quieres hacer un estudio exhaustivo y asesorarte profesionalmente para conseguir la mayor eficiencia y control de los costes energéticos, contacta con nosotros.